El presidente de Francia, Emmanuel Macron, encabezó ayer la celebración anual del Día de la Bastilla, con un desfile que tuvo como característica principal la cooperación militar de Europa.

Macron estuvo acompañado por líderes europeos como la canciller alemana, Angela Merkel, el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, la ministra española de Defensa, Margarita Robles y el vice primer ministro británico, David Lidington.

Las banderas de los 10 países que forman parte de la Iniciativa de Intervención Europea, un pacto militar creado el año pasado, encabezaron el desfile que recorrió Campos Elíseos.

La celebración incluyó más de cuatro mil elementos de las fuerzas armadas, y el despliegue de 196 vehículos, 237 caballos, 69 aviones y 39 helicópteros, aunque quien atrapó la atención de los presentes fue el excampeón de esquí acuático Franky Zapata, quien apareció, con un misil en mano, sobrevolando la zona sobre una plataforma voladora (flyboard) que puede alcanzar los 190 kilómetros por hora.

Angela Merkel aseguró que la invitación para celebrar el Día de la Bastilla es un “símbolo de una cooperación europea intensificada” y un “gran gesto hacia la política militar europea”.

El de ayer fue el tercer desfile que encabeza Macron desde que asumió el poder en mayo de 2017; sin embargo, esta ocasión fue recibido con silbidos y abucheos cuando ingresó al estrado principal, ubicado en uno de los extremos de los Campos Elíseos, debido a la crisis que enfrenta su gobierno con el movimiento social de los “chalecos amarillos”.

“Nunca, desde el final de la Segunda Guerra Mundial, Europa había sido tan necesaria. La construcción de una Europa de la defensa, vinculada con la Alianza Atlántica, de la que celebramos los 70 años, es para Francia una prioridad y constituye el hilo rojo de este desfile”, expresó en su discurso el mandatario francés.

Protestas en la conmemoración del Día de la Bastilla.
Protestas en la conmemoración del Día de la Bastilla.Fuente: Reuters
Varios cientos de activistas, que no portaban su distintivo chaleco amarillo, se reunieron en la orilla de la ruta del desfile y se vieron involucrados en enfrentamientos con la policía.

Al final, la policía francesa detuvo a 152 personas en París durante los actos de celebración de la fiesta nacional.

Según la cadena CNews, dos de los detenidos son Jérôme Rodrigues y Éric Drouet, presuntos líderes de los “chalecos amarillos”.

“Quienes han intentado impedir este desfile deberían tener un poco de vergüenza. Hoy es un día en el que la nación se une y creo que la nación debe ser respetada”, señaló a la prensa el ministro francés del Interior, Christophe Castaner.