CIUDAD DE MÉXICO.- Después de colgar los botines, Diego Armando Maradona tuvo una larga y diversa carrera como técnico de diferentes equipos, llegando a ser el entrenador de la selección de Argentina en el Mundial de Sudáfrica 2010, donde la albiceleste se despidió goleada 4-0 por Alemania en cuartos de final.

Tras su paso por la selección se desempeñó como técnico en diferentes clubes del mundo, como Al Wasl y Fujairah FC de Emiratos Árabes Unidos, y Dorados de Sinaloa, de la segunda división de México.

Luego de su experiencia en el exterior volvió al país en septiembre del 2019 cuando Gimnasia y Esgrima La Plata lo contrató para dirigir el equipo que marchaba colista del torneo. Dos meses después renunció al club en respaldo al entonces presidente Gabriel Pellegrino, que había anunciado que no se presentaría a la reelección, pero poco después volvió al cargo tras un acuerdo entre la cúpula directiva.

Ahí estaba hasta el momento de su muerte, dirigiendo por videollamada con la ayuda de sus asistentes tras sufrir a inicios de este mes complicaciones de salud.

Hace dos semanas, Maradona abandonó el hospital donde se encontraba internado para continuar con un tratamiento de rehabilitación en su casa tras una intervención en la cabeza y un cuadro de abstinencia al alcohol.

Pocos días antes había sido operado de un hematoma subdural y luego, por decisión familiar y médica, permaneció internado debido a un “bajón anímico, anemia y deshidratación”, según informes médicos.

La vida personal de Maradona fue tan cambiante y polémica como su vida profesional. Además de sus hijas mayores Dalma y Gianinna -con quienes en los últimos años mantuvo vaivenes en su relación-, el astro tuvo 6 hijos en distintas partes del mundo.

“Si me muero, quiero volver a nacer y quiero ser futbolista. Y quiero volver a ser Diego Armando Maradona. Soy un jugador que le ha dado alegría a la gente y con eso me basta y me sobra”, expresó el “10” en una entrevista con un medio argentino en 1992.