El COVID-19 en México se encuentra en su fase de crecimiento exponencial de contagios, por lo que en las siguientes semanas viene la etapa más difícil de la pandemia, que en el país ha dejado 14 mil 677 casos confirmados hasta el domingo.

Para enfrentar esta emergencia sanitaria, se han llevado alianzas entre el sector privado y el público, como la unión anunciada el 13 de abril entre los hospitales de la IP y los del Gobierno federal, la cual tiene el fin de liberar camas en las instituciones de salud que atienden COVID-19.

Este lunes, en la mesa ‘Apoyo del sector privado al sistema de salud’ de la Conferencia Nacional para la Recuperación Económica, organizada por el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), se expusieron diferentes posturas para que el sector privado apoye al Gobierno en la contienda contra el nuevo coronavirus.

Carlos del Río, director del Departamento de Salud Global de Hubert en la Escuela de Salud Pública Rollins de la Universidad Emory, señaló que es necesario ir más allá de las pruebas y pasar al seguimiento de contactos; además, apoyar a empleados mediante la implementación de distintos turnos y trabajar de manera remota.

Si algunas industrias ya han podido implementar el trabajo a distancia, es importante aprovechar la oportunidad y explotar los recursos tecnológicos en más campos, indicó la senadora Alejandra Reynoso Sánchez.

La legisladora dijo que es el momento de que, apoyados en el sector empresarial, se implemente la telemedicina para disminuir la asistencia y concentración en hospitales, así como llevar a cabo el control de medicamentos e inventarios con software para la administración de recursos humanos y médicos.

Sofía Ize Ludlow, presidenta de la Fundación BBVA, recalcó que, entre otras acciones, el banco ha volcado a su equipo de compras para adquirir equipo médico por 131 millones de pesos.

La fundación además trabaja junto con la Cruz Roja y Médicos Sin Fronteras para la adaptación de hospitales móviles, y con la UNAM para la capacitación de personal médico.

Patrick Devlyn, presidente de la comisión de Salud del CCE, añadió que una propuesta fundamental es lograr cobertura de casos COVID-19 en las pólizas de gastos médicos, y que junto a ello se logre incluir oxígeno en casa para los pacientes que lo requieren para continuar su tratamiento.

Cinco medidas que propone el CCE
Devlyn expone cinco medidas necesarias para apoyar e impulsar al sector de la salud durante la crisis sanitaria del COVID-19.

– La primera medida consistió en buscar fortalecer la capacidad de producción y abasto industrial del país.

“Esto lo proponemos para que la fabricación y la disposición de insumos prioritarios para la salud fluyan y nos aseguremos que las líneas de producción estén trabajando a su potencial y que las cadenas de abastecimiento también sean ágiles con la ayuda de la autoridad”, expresó.

– En segundo lugar, Patrick Devlyn indicó que es necesario trabajar estrechamente con la alianza de Organización Mundial de la salud (OMS), llamada ‘Access to Covid-19 Tools Acelerator’, ya que está diseñada para acelerar el desarrollo y producción de terapias y vacunas, seguras y asequibles que garantizarán que nadie se quede atrás en la lucha contra el COVID-19.

– Como un tercer punto, el presidente de la comisión de salud del CCE apuntó que se debe lograr un mayor aprovechamiento de infraestructura pública y privada.

“Esto dará un mayor alcance al sistema nacional de salud, permitiendo una mayor capacidad de atención a pacientes”, dijo.

-Como cuarta y quinta medidas, se pretende lograr una cobertura de casos COVID-19 en las pólizas de gastos médicos y que el regreso a las actividades productivas se planee de manera escalonada y bajo entornos de trabajo seguros y saludables.

Con información de Héctor Usla*