SemMéxico.- Luego de una campaña emergente el día de ayer por la búsqueda de activista Isabel Cabanillas de la Torre tras ser reportada como desaparecida, la noticia de la localización del cuerpo acribillado de esta joven pintora ha desatado una fuerte indignación en esta frontera.

La noticia pone de relieve una realidad que contrasta con los dichos del presidente de la República que, en su reciente visita, puso como ejemplo de compromiso en el tema de seguridad al presidente municipal Armando Cabada.

Ante este canalla asesinato, el llamado a la movilización en las calles no se hizo esperar. Cientos de manifestantes se dieron cita con mantas, pancartas y consignas en el Monumento a Benito Juárez, de donde partieron marchando por el centro hasta el lugar del crimen.

Durante la marcha se realizaron pintas de denuncia y repudio a las distintas autoridades. Se pudo ver a los manifestantes visiblemente consternados y enojados ante una realidad atroz que no deja de golpear a los fronterizos.

En el lugar, destacó el escandaloso despliegue policíaco, en su mayoría de mujeres policías, quienes en todo momento custodiaron la manifestación, un proceder a todas luces intimidatorio. No pocos manifestantes repudiaron este despliegue de una corporación que participa activamente, no solo por ineficiencia u omisión en la violencia que golpea a los juarenses y con especial énfasis a las mujeres.

Ciudad Juárez tiene una alta tasa de feminicidio desde hace décadas, y por desgracia los asesinatos de mujeres no cesan, sumando en este caso, a una joven mujer que era parte del Movimiento de Mujeres que luchan contra la violencia Feminicida, Integrante del colectivo Hijxs de su Maquilera Madre en esta ciudad fronteriza.

Es fundamental que este caso no quede impune y que se esclarezca. Que la respuesta ante cada asesinato sea el camino de la movilización retomado hoy en las calles de Ciudad Juárez que es la vía para que verdaderamente se logre el juicio y castigo a quien o quienes hayan perpetrado este feminicidio contra Isabel Cabanillas. No podemos dejar de denunciarlo de esta manera, porque más allá del cobarde que disparó el arma, el escandaloso grado de impunidad y desprecio por las vidas de las mujeres por parte de los tres niveles de gobierno nos confirman que el feminicidio es un Crimen de Estado, por acción, omisión o aquiesencia.

Bajo el grito de “Ni Una Menos”, la reciente movilización llama a continuar con las manifestaciones y se convoca para mañana a marchar.

El feminicidio de Isabel tuvo lugar en el centro histórico de Ciudad Juárez, mismo que se promueve por las autoridades locales como «corredor seguro» para las mujeres. Es el centro de esta ciudad uno de los puntos donde más se cometen desapariciones de mujeres y feminicidios.

Los botones de pánico no responden con celeridad ni al mismo presidente municipal que los promociona, y al momento de hacer uso de ellos, la señal de Internet que emiten es inservible, aunado a esto, la mayoría de las calles del centro permanecen en la oscuridad por capricho del presidente municipal en turno.

Este discurso de los corredores seguros para las mujeres, así como los llamados botones de pánico ante posibles escenarios de peligro terminan siendo una estrategia impotente del Estado, que a través del gobierno municipal trata de limpiarse la cara, sin éxito, del discurso de que Ciudad Juárez es la ciudad del feminicidio.
Lo denunciamos fuerte y claro. Es el Estado quien legitima, perpetúa y fortalece la violencia machista y patriarcal contra las mujeres, Mientras las organizaciones no gubernamentales que dicen estar con las víctimas, no pocas organizaciones sociales, políticas, sindicales y democráticas de esta ciudad, de Chihuahua y del país continúan manteniendo desde hace 30 años una estrategia impotente de conciliación y coadyuvancia con el Estado cuyo resultados no ha bajado ni menos detenido el aumento descarnado de los feminicidios que nos acechan.

Desde Pan y Rosas repudiamos el feminicidio de Isabel Cabanillas y exijimos justicia. Respaldamos el llamado a movilizarnos en las calles por justicia para nuestra compañera.