La tasa de ocupación en el sector informal representó el 27.58% de la población ocupada en el país, su nivel más alto en los últimos cuatro meses, según datos del Inegi.

La tasa de informalidad laboral registró un aumento de 0.4 puntos porcentuales durante agosto, lo que estableció al índice en 56.33 por ciento, informó este miércoles el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

De acuerdo con el órgano estadístico, la informalidad toma en cuenta la proporción de la población ocupada que es laboralmente vulnerable por la naturaleza de la unidad económica para la que trabaja, ya que su vínculo laboral no es reconocido por su fuente de trabajo.

Además, la tasa de ocupación en el sector informal (personas que trabajan en ‘changarritos’, tianguis, puestos de comida, diversos oficios, etc.) representó el 27.58 por ciento de la población ocupada en el país, su nivel más alto en los últimos cuatro meses.

Respecto a la tasa de desocupación, que es aquella que contabiliza al porcentaje de la Población Económicamente Activa (PEA) que no trabajó durante la semana en la que se levantó la encuesta, aunque manifestó sus intenciones de hacerlo, registró prácticamente el mismo nivel que el mes anterior, al ubicarse en 3.57 por ciento.

De acuerdo con las cifras mensuales de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), la desocupación en hombres registró una importante alza, al pasar de 3.47 por ciento en julio a 3.81 por ciento en agosto, mientras que por el lado femenino se observó el fenómeno opuesto, al reportar un decremento de 3.61 a 3.21 por ciento entre julio y agosto del presente año.

Alberto Ramos, economista para Latinoamérica de Goldman Sachs, destacó que la creación de empleo formal ha continuado desacelerándose, ya que según datos del IMSS, el empleo formal creció 1.79 por ciento anual en agosto, por debajo del 2.19 por ciento registrado en julio, de esta forma, la creación formal de empleo registrada en agosto fue la más baja en 9 años.

“Aunque el contexto del mercado laboral aún es sólido, la fuerte desaceleración económica y la moderación de la creación de empleo desde el segundo trimestre de 2018 son tendencias que deben monitorearse de cerca ya que están erosionando lo que hasta ahora ha sido uno de los macro fundamentos más fuertes de México”, agregó.

Por otra parte la tasa de subocupación presentó su primera disminución en seis meses, al representar el 7.26 por ciento del personal ocupado en México, su menor nivel desde el pasado marzo.

Esta tasa mide el porcentaje de personas ocupadas que tienen la necesidad y disponibilidad de ofrecer más tiempo de trabajo de los que su ocupación actual le demanda.

A su vez, durante agosto se observó que el 60 por ciento de la población que tiene más de 15 años, es catalogada como económicamente activa, nivel ligeramente inferior al de julio.