Andrés Manuel López Obrador, presidente de México.Fuente: Cuartoscuro

El presidente Andrés Manuel López Obrador rechazó ayer las recomendaciones de la ONU sobre la precaución que debe tener un gobernante al hablar de la prensa.

Durante una gira de trabajo en el municipio de Zongolica, Veracruz, el presidente criticó la entrevista que diera el exsecretario ejecutivo del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), Gonzalo Hernández, a la revista Proceso, y afirmó que seguirá hablando de la revista y de los medios que no “contribuyan a la transformación de México”.

Añadió que el exfuncionario “está molesto” porque perdió su sueldo de 220 mil pesos mensuales.

El Presidente hizo referencia a las recomendaciones que le hiciera la Oficina de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para Derechos Humanos, el viernes pasado:

“Están molestos, pero ni un paso atrás. Aunque vengan recomendaciones de la ONU para que no digamos que Proceso es una revista conservadora… vamos a seguirlo diciendo. El que no contribuye a la transformación de México y está a favor del inmovilismo, del status quo, es conservador… se dedique a la política o al periodismo. Vamos a seguir hablando de estos temas”.

Inclusive preguntó a los asistentes a su mitin en Zongolica si alguno conocía al Coneval, y la mayoría expresó que no había oído hablar del organismo.

Hizo referencia a la entrevista con Hernández Licona, de quien recordó que “ya llevaba 13 años y quería seguir ahí”. Añadió que por “cuestiones de honestidad él debería de entender que ya no es la misma política, no somos neoliberales, nosotros luchamos en contra de la política neoliberal, porque la consideramos neoporfirista y es una política antipopular, entreguista. Claro que caló hondo, porque fueron 36 años de esa política y ahora que se dan los cambios pensaban que iba a ser por encimita, nada más maquillaje, que iba a ser nada más lo superficial, que iba a ser simulación, más de lo mismo, pues no. No es cambio de gobierno, es cambio de régimen, es la cuarta transformación de la vida pública del país. Dice el señor director o el que era director, le dice a Proceso, que yo ya abandoné mi compromiso de atender a los pobres”.

Añadió: “Yo llegué a la Presidencia y me bajé el sueldo, porque el presupuesto se quedaba arriba (…) ¿Cuánto ganaba el director del Coneval? 220 mil pesos al mes. Por eso están molestos”.