El integrante de los Rolling Stones asegura que sólo bebe una copa de vino en las comidas y alguna cerveza. "Es como la heroína. El experimento ha terminado", dice.

Keith Richards ha revelado que trata de dominar su “infame” estilo de vida y para ello ha reducido el alcohol y sus amados cigarrillos, en una nueva entrevista con la revista MOJO. El rockero de los Rolling Stones admitió que comenzó a hacerlo al inicio de este año por motivos de salud, después de que en diciembre celebrara “una larga fiesta” por su 75 cumpleaños y su 35 aniversario de boda con su esposa Patti Hansen en su lujosa casa de Turks & Caicos, en Parrot Cay.

El creador de éxitos como Gimme Shelter dijo: “Fue una buena manera de comenzar un nuevo año, ¿verdad? Ahora tomo un poco de vino con las comidas, y una Guinness o una cerveza o dos, pero por lo demás … nada. Es como la heroína: el experimento ha terminado”. Pero reconoce que el camino es largo. “Eso sí, si te encuentro en un bar y me dices: ‘¿Quieres un trago?’ ¡No lo rechazaría! No soy un puritano en estos asuntos. Es solo que ya no está en mi menú diario”.

Cuando se le preguntó si alguna vez había tratado de dejar los cigarrillos, el guitarrista dijo: “Lo he intentado. Hasta ahora, sin éxito. [El cantante] Lou Reed afirmó que la nicotina era más difícil de abandonar que la heroína, y así es”. Y añadió: “Dejar la heroína es como el infierno, pero es un infierno corto. Los cigarrillos siempre están ahí. Solo los cojo y los enciendo sin pensar. Pero últimamente me las arreglé para reducirlos a una cantidad sustancial todos los días, y todavía estoy trabajando en ello porque me he dado cuenta de que no los necesito. Me he dado cuenta de que es un hábito inútil. Pero oye, cuando tienes 75 años, los hábitos están bastante arraigados”.

Estos buenos propósitos llegan un año después de que en una entrevista al diario The Daily Telegraph, el guitarrista de los Rolling Stones asegurara que llevaba dos meses sin probar las drogas. “No estoy diciendo que definitivamente esté fuera de todo esto. Dentro de seis meses, podría estar de nuevo en ese mundo”, reconocía entonces al rotativo británico. Richards contó en la entrevista que no ha dejado las sustancias por necesidad, sino porque ha perdido el interés en las drogas, que cree que con el paso del tiempo se han vuelto “aburridas y flojas”: “Las drogas que hay hoy en día por ahí no me fascinan lo más mínimo, se han convertido en algo institucionalizado. Además, he probado de todo en la vida, ya no hay nada que me pueda sorprender”.

A pesar de su ajetreado estilo de vida, lanzándose por todo el mundo para los conciertos con los Stones, la estrella dice que aún no tiene un teléfono móvil y confiesa que es “bastante analfabeto desde el punto de vista técnico”. “Confío en mis hijos o en mi esposa para cosas tan simples como buscar en Google. No toco esas cosas. Nunca me han gustado los teléfonos. Tal vez sea solo porque el teléfono siempre está sonando y siempre hay alguien que quiere algo”.